Hoy quiero contarte por qué la doble exfoliación puede marcar un antes y un después en tu piel, y qué trabajos realiza cada tipo de exfoliante para lograr un cutis más luminoso y saludable.
Quizá no lo sabías, pero muchos de los problemas de textura, poros dilatados o piel apagada se deben a que no exfoliamos correctamente.
Quédate hasta el final del artículo, porque descubrirás un secreto sencillo que cambiará tu rutina facial.
¿Qué es la doble exfoliación?
La doble exfoliación combina la exfoliación física con la química. Cada una realiza trabajos diferentes en la piel, y cuando se unen, se potencian sus beneficios. De esta manera, la piel queda libre de impurezas superficiales y también más receptiva para los tratamientos posteriores. Aquí te explico los dos tipos de exfoliaciones:
Se apoya en pequeñas partículas que arrastran las células muertas de manera mecánica. Es como una limpieza manual de la superficie cutánea.
Emplea ácidos o enzimas que disuelven las uniones entre las células muertas, penetrando un poco más en la piel y estimulando la renovación celular.
Diferencias entre la exfoliación física y química
Entender las diferencias entre la exfoliación física y la exfoliación química es clave para saber por qué conviene usarlas juntas:

Exfoliación física
La exfoliación física actúa en la capa más externa.
Mejora la textura y elimina células muertas al instante.

Exfoliación química
La exfoliación química trabaja a un nivel más profundo, ayudando a unificar el tono, suavizar manchas y prevenir imperfecciones.


Beneficios visibles de la doble exfoliación
- Más luminosidad y frescura en el rostro.
- Reducción de poros obstruidos y puntos negros.
- Mejor absorción de sérums y cremas.
- Maquillaje más uniforme gracias a una superficie lisa.
- Un tono más homogéneo y revitalizado.
Exfoliantes recomendados
Personalmente, los que siempre recomiendo son los de Arturo Alba, porque tienen el combo perfecto para la doble exfoliación:
Advertencias y recomendaciones
Como médico estético, siempre insisto en algo: exfoliar está bien, pero no hay que excederse. Aquí algunos consejos:
- No uses exfoliación física y química el mismo día si tu piel es sensible.
- Evita exfoliar más de 2 veces por semana.
- Protección solar siempre después de exfoliar.
- Adapta la frecuencia según tu tipo de piel.

Conclusión: un cuidado que va más allá
La doble exfoliación es un hábito que potencia los resultados de cualquier rutina cosmética. Cuando entiendes los distintos trabajos que hacen los exfoliantes, comprendes que no se trata solo de eliminar células muertas, sino de preparar la piel para que reciba lo mejor de tus tratamientos.
En mi consulta siempre insisto: una piel que se exfolia bien, responde mejor. Empieza poco a poco, escucha a tu piel y notarás la diferencia.
Si quieres seguir aprendiendo sobre el cuidado de tu piel, te invito a leer más en mi blog y en mi cuenta de Instagram.